Devolver Zaku Tenari a los nativos

Este financiamiento para Sierra Nevada lo llamamos un GROUNDfunding porque vamos a recomprar tierras para proteger las fuentes de Agua Sagrada, su suelo natal y la herencia de los nativos. La misión es financiar colectivamente la montaña Zaku Tenari y devolverla a sus legítimos dueños en la Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia. Los dueños legítimos son cuatro tribus indígenas: los Kogis, los Wiwas, los Arhuacas y los Kankuamos. Juntos son los protectores del Corazón de la Tierra.

Con esto hacemos un llamado a sus corazones para comprar juntos por el bien de todos esta montaña con todas sus fuentes de agua.

En la actualidad, el monte Zaku Tenari está amenazado con la desecación y extinción de su extensa flora y fauna debido a la pura codicia. Codicia por extraer oro. Esta montaña tiene una extensión de 100 hectáreas, de las cuales 20 hectáreas son manantiales de agua dulce, que fluyen hacia el interior para dar vida a todo el valle. Hay un plan avanzado para extraer oro de la montaña, los agricultores son comprados con grandes cantidades por sus tierras, las grandes multinacionales de Japón pagan a las empresas mineras en Colombia para extraer el oro del suelo. Realmente no les importa que toda la montaña muera, que las aguas del interior nunca vuelvan a fluir, los habitantes ya no podrán comer de sus huertas y la naturaleza quedará totalmente destruida si estos planes siguen adelante. Y todo por el oro, un recurso que pertenece a la tierra para una Tierra en equilibrio. Hay una consulta previa entre los pueblos indígenas y el Patrimonio Mundial de la UNESCO, para ver si este importante territorio puede ser protegido, se tomará una decisión en el mes de julio. Esperamos haber financiado colectivamente la cantidad total antes de esa fecha para poder comprar la montaña antes.

¿Te nos unirás? Porque con las decisiones que tomamos ahora nos aseguramos una tierra verde y saludable para nosotros mismos, nuestros hijos y todas las generaciones venideras ...

Esta montaña, del tamaño de 100 hectáreas, tiene una energía inestimable, pero tiene un valor monetario de 395.000 euros. Solo se necesitan unas pocas personas con el Corazón en el lugar correcto para salvar este hermoso pedazo de Tierra. Las aguas seguirán fluyendo, las plantas y los animales seguirán viviendo y, lo más importante, los nativos pueden seguir compartiendo su sabiduría para equilibrar y mantener la tierra. Nos atrevemos a pensar en grande por el colectivo, por la Tierra. Todo ya está ahí, el dinero que rota generosamente por todo el mundo, solo hay que manifestarlo donando.

Juntos podemos crear esa nueva tierra, unirnos por la Tierra. El dinero es un intercambio de energía y si las donaciones se hacen desde nuestro CORAZÓN, no solo la montaña podrá ser devuelta a los nativos y, por lo tanto, a la Tierra misma, sino también mucha energía positiva y curativa que circula por la Tierra. ¿También sientes que quieres contribuir a una tierra sana en equilibrio?

Entonces haga su contribución ahora, cada contribución de su Corazón, grande o pequeña cuenta.